Entre los días 8 y 11 de julio, 45 niños de toda la provincia convivieron en el Seminario de Jaén durante la celebración del XIX Cursillo Diocesano de Monaguillos. “Este encuentro tiene como objetivo inmediato que los niños convivan y que sepan ser monaguillos. Es un encuentro vocacional así que queremos, también, que ellos se pregunten si el señor les llama y cómo les llama, intentar orientarles para que se pregunten por su propia vocación, sea la que sea. Este año están participando 45 niños. Ha bajado un poco el número. Otros años hemos estado entorno a los 60. Hay niños de Cazalilla, de Mengíbar, de Alcaudete, de Linares, de Baeza, de Jaén, de Sabiote, etc. De Cazalilla han venido cinco niños, es el pueblo que más ha mandado”, aseguraba D. Pedro Ortega, rector del Seminario.
Entre los actos programados para esos tres días de convivencia había actividades de lo más variadas, tal y como explicaba el Sr. Rector: “Tienen misa y oración; catequesis, orientada a historia de santos, para que ellos vean la vida cristiana realizada en algunos de ellos; y luego juegos y baños, porque esto también ayuda a convivir”.
Entre los actos más destacables se encuentra la jornada del domingo, en la que se realiza un encuentro con los padres. “Nosotros queremos también que los padres conozcan lo que se hace con sus pequeños aquí. Y el domingo es un día para eso. El encuentro con los padres con la celebración de la Eucaristía al final. También se puede destacar la misa con el Sr. Obispo. Pero como actos significativos para los propios niños están los juegos y baños. Aunque también la celebración de la fe y la catequesis. Realmente a cada niño le gusta una cosa y se siente cómodo en una cosa distinta. No pretendemos que sean días de conocimientos especiales, sino que los niños convivan, que estén contentos y que conozcan la casa. Precisamente se hace aquí porque es el lugar de formación de los futuros sacerdotes”.
El Seminario Diocesano celebra todos los años este encuentro, así como otros destinados a alumnos de ESO y Bachillerato, Encuentros Vocacionales Manuel Aranda. “Hay muchos que han seguido el proceso entero, han estado en todos los encuentros y se han preguntado por su ministerio. Pero aunque la mayoría no lleguen a ello, sí tienen una experiencia gozosa de la Iglesia, de convivencia, de esta casa, etc. Este tipo de encuentro no está orientado para que tengas que llegar a algún sitio a la fuerza. Está orientado, principalmente, para que los chicos conozcan la vida cristiana. Después que cada uno siga el camino que tenga que seguir”.
Entre los actos programados para esos tres días de convivencia había actividades de lo más variadas, tal y como explicaba el Sr. Rector: “Tienen misa y oración; catequesis, orientada a historia de santos, para que ellos vean la vida cristiana realizada en algunos de ellos; y luego juegos y baños, porque esto también ayuda a convivir”.
Entre los actos más destacables se encuentra la jornada del domingo, en la que se realiza un encuentro con los padres. “Nosotros queremos también que los padres conozcan lo que se hace con sus pequeños aquí. Y el domingo es un día para eso. El encuentro con los padres con la celebración de la Eucaristía al final. También se puede destacar la misa con el Sr. Obispo. Pero como actos significativos para los propios niños están los juegos y baños. Aunque también la celebración de la fe y la catequesis. Realmente a cada niño le gusta una cosa y se siente cómodo en una cosa distinta. No pretendemos que sean días de conocimientos especiales, sino que los niños convivan, que estén contentos y que conozcan la casa. Precisamente se hace aquí porque es el lugar de formación de los futuros sacerdotes”.
El Seminario Diocesano celebra todos los años este encuentro, así como otros destinados a alumnos de ESO y Bachillerato, Encuentros Vocacionales Manuel Aranda. “Hay muchos que han seguido el proceso entero, han estado en todos los encuentros y se han preguntado por su ministerio. Pero aunque la mayoría no lleguen a ello, sí tienen una experiencia gozosa de la Iglesia, de convivencia, de esta casa, etc. Este tipo de encuentro no está orientado para que tengas que llegar a algún sitio a la fuerza. Está orientado, principalmente, para que los chicos conozcan la vida cristiana. Después que cada uno siga el camino que tenga que seguir”.
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